sábado, marzo 07, 2009

Un futuro para ISKCON

por Radha Krishna dasa

Desde que inició «El Tambor Rugiente», varios devotos han cuestionado el beneficio real de mostrar y presentar una actitud crítica hacia el Movimiento Hare Krishna, si es evidente que sus líderes se encuentran muy desconectados de la realidad y poco deseosos de reflexionar sobre los cambios necesarios en la institución para que sea una propuesta viable.

Hay mucho de cierto en este señalamiento. Recuerdo diferentes momentos en los últimos 30 años en los que parecía que las cosas iban a cambiar cualitativamente para bien. Algunos momentos claves han sido: Cuando se rompió el monopolio de los 11 originales; cuando se dieron las reuniones de Nueva Vrindavan en septiembre de 1985; cuando la GBC se comprometió a una reestructuración en 1987; cuando se crearon los Deputies y parecía que nuevas voces inyectarían una visión más clara a la GBC; cuando Harikesa, y poco tiempo después Jagadish, se cayeron y surgió un sentido de introspección y renovación; cuando se celebró el centenario de Srila Prabhupada y se hablaba de reconciliación e inclusión; cuando se creó la Child Protection Office luego de las demandas millonarias de los Gurukulis en contra de la GBC; cuando se formó el "ISKCON Resolve" para mediar y resolver conflictos internos en la organización, etc. Al final no se vio ningún cambio sustantivo.

Yo recuerdo haber participado activamente en foros iskconianos a finales de los 1990s, de donde salían ideas excelentes para un ISKCON más moderno y responsable. Temas muy interesantes que se trataron entonces fueron: El entrenamiento de la GBC, la rendición de cuentas de la GBC, el monitoreo eficaz de la GBC, la cuestión de la representatividad, la disminución del poder de los mullahs o sannyasis dentro de la GBC, el desarrollo de un sistema de Justicia totalmente independiente de la GBC, la reflexión sobre el error que se cometió al alterar los libros de Srila Prabhupada y las motivaciones que llevaron a semejantes cambios, aprender a reconocer las carencias espirituales de los líderes espirituales del Movimiento y dejar de refugiarse en sofismas para justificar la pureza, avance y madurez que no tienen, etc. Un gran grupo de devotos de todo el mundo contribuía en estas discusiones para enriquecerlas enormemente. ¿Qué salió de todo esto? Nada.

Lo que si sabemos es que —al día de hoy— el Movimiento se caracteriza por lo siguiente: No hay ninguna verdadera representatividad por parte de la congregación a pesar de que ese es el espíritu de la D.O.M. Existe una GBC tirana que concentra en sí todas las funciones ejecutivas, legislativas y judiciales del Movimiento, y que como resultado cae dentro del esquema de "el poder corrompe, el poder absoluto corrompe absolutamente". Esa GBC no ha desarrollado ningún sistema de selección, evaluación, entrenamiento, monitoreo o sanción real para sus miembros, excepto por algunos mecanismos que se parecen más a los usados por organizaciones mafiosas y de gobiernos espurios para su control interno. Promueve a gurus totalmente indignos del cargo, pues sus atribuciones morales y falta de comportamiento ejemplar los delatan a cada paso; aun así se les dan honores tradicionales acostumbrados en India para personas excepcionales (aquí nos referimos a guru-pujas, lavado de pies, celebraciones de vyasa-puja, designación de títulos majestuosos, etc.).

Recientemente estuve en Nueva York, y me acordé de la época en la que el alcalde de la ciudad era el republicano Rudy Giuliani. Cuando él fue electo, el lugar parecía Ciudad Gótica, donde prevalecen el crimen y la violencia. Giuliani estableció el sistema de "Cero Tolerancia" que es acreditado como una importante causa de la disminución posterior del crimen en la ciudad. Lo que mucha gente no entiende es que el sistema de cero tolerancia no tiene nada que ver con los criminales, sino con los cuerpos policiacos. El énfasis fue en depurar y mejorar a la policía, en vez de esforzarse por combatir al crimen con una policía mediocre y corrupta. Es el mismo caso con ISKCON. Se habla de planes para finalmente construir el nuevo templo de Mayapur, para entrenar a nuevas generaciones de líderes, para distribuir más libros, etc. Pero si la estructura esencial del Movimiento no cambia —aquella conformada por el GBC y quienes se presentan como gurus auténticos—, todo lo demás será cosmético y superficial.

En «El Tambor Rugiente» reconocemos esto, y desconocemos el destino final del Movimiento. En el caso de Hispanoamérica los indicios no son muy halagüeños. Se dio recientemente el atropello en Costa Rica que afortunadamente no parece que quedará impune; en México los templos son pocos y débiles (en la ciudad de México desde hace tiempo ni siquiera hay presidente, sino un administrador diurno que cobra por sus servicios); en Guadalajara hubo un intento criminal oficial por parte de ISKCON de robarle su propiedad a un devoto, pero que no ha progresado; el conjunto de GBCs regionales se ven incompetentes, oportunistas y desorientados.

En un contexto así, hay voces que dicen que ya no vale la pena aspirar a un cambio positivo e importante en la institución, y que lo mejor es darle la espalda y buscar el camino por otra parte. A continuación presentamos un par de opiniones al respecto. En cualquier caso, «El Tambor Rugiente» tiene la función de publicar información relevante para que cada lector forme sus propias conclusiones al respecto y determine el mejor rumbo personal a tomar. También es importante tener este registro crítico para que los devotos entiendan lo que se ha ido dando con el tiempo y la manera en que esto ha afectado a sus propias vidas espirituales.


PATEANDO A UN CABALLO MUERTO
por Jagannatha Misra das, Sampradaya Sun
Islas Canarias, 4 de marzo, 2009

Personalmente creo que a estas alturas estamos pateando a un caballo muerto. En lo personal voy a poner en práctica lo que escribí hace tiempo, sobre lo que Srila Prabhupada había dicho de qué hacer con líderes incompetentes: Olvidarse de ellos, especialmente del GBC, y continuar las actividades devocionales y la prédica en compañía de devotos que sabemos con certeza que no tienen intenciones egoístas y que no aclaman ni toleran los males de la institución.

Para mí, la institución ISKCON está acabada más allá de toda esperanza, y lo digo después de muchos años de tratar de acomodarse a ella. Pero el verdadero movimiento ISKCON puede todavía resurgir con la ayuda de quienes entienden los principios elementales que la élite actual abandonaron uno por uno.

Y la solución no es crear otra institución opuesta a la actual, lo cual estaría destinado al fracaso sin la presencia personal y directa de un Acharya poderoso. La respuesta es ayudarse los unos a los otros orgánicamente —alejados de la estructura de ISKCON que es precisamente el principal impedimento para nuestra unión—, y crear nuestros propios grupos de apoyo. Eso es que, por ejemplo, nos ayudemos mutuamente a promover el Sankirtan, los libros, el prasadam, etc.

Hay que unirnos, colaborar, y ayudarnos globalmente para continuar con gran fuerza localmente. ¿Alguna idea?

UN CABALLO DE COLOR DIFERENTE
por Ray Lanthier, Sampradaya Sun
Los Angeles, Calif., 5 de marzo, 2009

En el artículo "Pateando a un caballo muerto", Jagannatha Mishra nos exhorta a dejar de darle vueltas al evidente hecho que ISKCON es un fracaso. No hay duda, a juzgar por el hedor, que el caballo está muerto. Concuerdo con que esto le debe de ser obvio a cualquiera que tenga la más mínima inteligencia y percepción.

No hay duda que, además de los devotos más viejos que no tienen a dónde ir, cualquiera que está dedicado a ISKCON a estas alturas —con todo su historial al alcance de cualquiera que se tome la molestia de investigarlo— es el tonto número uno. Este caballo muerto se los trae paseando. Sin embargo, es difícil ignorar la representación fraudulenta y las continuas ofensas en contra del Fundador-Acharya.

El silencio de uno implica aprobación, pero las décadas de protestas y denuncias han tenido un efecto nulo. Es sabio dejar al engañado a la suerte del engañador. Me desconcierta ver a devotos que tratan de tener un diálogo significativo con el GBC. Quiza una verdad tan obvia debería imprimirse en camisetas, escribirse en el cielo, anunciarse desde aviones, exhibirse en avisos espectaculares de las carreteras: EL GBC ES CORRUPTO, AL GBC NO LE IMPORTA. Y quienes sean ciegos espiritualmente podrán postrarse y ser arrollados.

¿Qué hacer? ¿Grupos de apoyo? Eso está bien para empezar, pero ¿cómo ayuda al progreso de la misión? Srila Prabhupada registró una institución y estableció templos por motivos muy prácticos.

Cuenta la fuerza de los números, la energía bien enfocada de muchos devotos sinceros asociados y que busquen la misma meta. Si el verdadero ISKCON sólo puede sobrevivir como una red difusa de grupos de apoyo, entonces, aunque pueda ayudar a los olvidados, su impacto social será mínimo. ¿Predicar es la esencia?

1 comentario:

Hrisikesa dijo...

Leyendo algunas de las entregas de este blog me quede pensando varias veces "¿cual es el mérito de patear muertos?" Ahora los dos comentarios que acaban de ser publicados y el post de Radha Krisna das me confirman mi sentir.

Es obvio que ISKCON no son las cuatro paredes que creemos que es, Sridhara Maharaja da una explicacion absoluta de lo que es ISKCON.

Si Prabhupada formo ISKCON por términos prácticos y si por términos prácticos es inviable ¿porque no hacer algo mas?. Si cuando La Liga de Devotos en Jansi no funciono y Prabhupada formo ISKCON, ahora que iskcon no funcionó, no funciona y por lógica no funcionara, ¿Porque seguir en la idea romántica de hacer querer funcionar iskcon? Alguna vez le preguntaron a Srila Prabhupada ¿y si iskcon no funciona? y el dijo "Hacemos otra cosa". ¿iskcon de peluche?

Entonces limitar a ISKCON a una seria de circunstancias fallidas y edificios vendidos por una banda de hampones es una visión menor.
Con un gbc que es de risa, un BBTpartido en dos, una Back t Godhead que da pena. Convertida en TIMES como quería Prabhupada, pero un "Times de Peluche".

Declarar que Srila Prabhupada no tuvo la potencia y pureza para formar si quiera un devoto que sea un guru fidedigno mas que otra cosa demeríta la posición y labor de Srila Prabhupada, "Gurus de Peluche" jocosamente les llama Astika das.

Si servir a la misión de Prabhupada es cada quien primero servir a los ideales por los que Prabhupada abandono su amada Vrindavana y sus queridos Radha Damodara, lo demás responderá a sentidos prácticos externos de un mundo material disfuncional por naturaleza. "¿Discípulos de Prabhupada de Peluche?"

Siento que muchos devotos usan la disfunción de iskcon como una fijación para arreglar sus problemas consigo mismos o porque se dieron cuenta que su proyecto de vida se fue al traste junto con aquello a lo que le dedicaron su vida y su corazón. Incluso después de supuestamente haber hecho una vida después de su paso por iskcon, no han cortado el cordón umbilical. ¿Devotos que no han crecido de Peluche?

Saludos sinceros no peluchezcos.

hrisikesa das