martes, diciembre 02, 2008

El Fanatismo, la Meta Final

(Cuando Aniruddha Prabhu envió la traducción del incidente del intento de despojo a la viejita que vivía junto al templo, incluyó también la traducción a un artículo que hablaba sobre un incidente de fanatismo en ISKCON Humgría. Lo incluimos aquí como parte del paquete completo y para ver que la conciencia fanática se manifiesta en todas partes del mundo.)

El día de ayer apareció en la revista cibernética Sampradaya Sun (con un promedio de 60.000 visitas diarias) un artículo escrito por un joven pero intelegente devoto húngaro de nombre Bhima Das. En escencia, Bhima Prabhu expresa la misma amarga experiencia que todo devoto con cinco dedos de frente vive tras el "encanto" inicial con los actuales líderes del movimiento fundado por Srila Prabhupada. Por ejercer su sentido de discriminación, por llamar las cosas por su nombre, por negarse a desoír la voz de su conciencia, este devoto también vio lo que casi todo el mundo ha visto, pero que la élite de ISKCON, en vez de prestar atención a los clamores a por la verdad, la justicia y una vida vaisnava ejemplar, empecidamente se aferran a ignorar, a desmentir o a justificar los hechos, y hasta injuriar a sus bien fundamentados detractores. Por último e invariablemente, a tomar duras represalias contra ellos, los "expositores de la verdad".

El artículo se titula "El fanatismo, la meta final". Permítanme traduirles unos pocos párrafos:

"Esta finca [bautizada con el nombre de "Valle de Krishna" y "Nueva Vraja Dham"] fue comprada por Sivarama Swami, el gurú para Hungría. A mi padre, Haripada das, se le encomendó el servicio de desarrollar esta finca y convertirla en una comunidad de devotos. Todo marchó bien y Deidades fueron instaladas en 1996. En 1999, cuando tuvo algunos desacuerdos con Sivarama Swami, mi padre renunció a su cargo de presidente de templo y se mudó a la India. Tras realizar esta acción se nos prohibió la entrada a todos los templos de ISKCON en Hungría, y se ordenó que ninguno de los devotos se asociaran con nosotros.

[En India] Caímos en la cuenta de que toda ISKCON está podrida desde la cabeza. Nos enteramos de todos los ocultamientos, las desviaciones filosóficas, y la verdadera condición des estos gurús desautorizados que hay en ISKCON. Nosotros empezamos a difundir estas verdades entre toda la comunidad de devotos, con la idea de que algunos de ellos también habrían reparado en los mismos yerros. Pero como respuesta a nuestra prédica, el "bando de los gurús" comenzó a proferir insultos contra nosotros y a adoptar medidas más drástica que las iniciales. Los gurús y sus discípulos adoptaron las tácticas "cultistas" practicadas extensamente dentro de ISKCON. Éstas --como todos lo saben-- consisten en lavarles el cerebro a los devotos y obligarlos a admitir hechos falsos. Como resultado, empezaron a llamarnos "demonios", que cualquier medida era válida para arremeter contra nosotros, etc. La respuesta normal.

Tuve una experiencia recientemente en la que uno de los devotos que estaba ocupado colectando dinero en las calles me paró y me pidió que le diera un donativo. Yo objeté y le expliqué las razones de mi objeción. Entonces este devoto --con quien me había relacionado por un espacio 3 años y que anteriormente había trabajado para nosotros--, comenzó a gritar: "Tú sabes que vas directo al infierno..., ¡todos vosotros! ¡Sois unos perdedores". Yo le pedí que racionalmente sustanciara sus opinionens, pero no pudo hacerlo. Entonces se abalanzó sobre mí físicamente y me propinó unos golpes. Todo esto ocurrió en una plaza pública.

Ahora bien, esta no el proceder inusual de una persona enredada en un culto. Lo único que podemos hacer es presenciar el fanatismo extremo que han inculcado en los devotos. A ellos no se les enseña ningún sastra; el contrario, se les enseña a interpretar los preceptos de una manera constreñida y superficial; se les enseña a no pensar por sí mismos, y se le enseña golpear a todo aquel que "ofenda" a su "maestro espiritual". Es exactamente lo opuesto a lo que Srila Prabhupada nos enseñó:

"Este movimiento para la conciencia de Krishna es para entrenar a hombres con el fin de que se vuelvan seres pensantes con un criterio intelectual independiente, y competentes en todos los departamentos de conocimiento y acción".
(Carta de Srila Prabhupada a Karandhara, 22/12/92).

Pero como esto no ha ocurrido, en ISKCON hay escasez de personas educadas y pensantes. La mayoría de los devotos nuevos son devotos de "arroz y dhal". O sea, se ocupan en el movimiento para la conciencia de Krishna para obtener beneficios materiales, no espirituales. Esto también fue condenado por Srila Prabhupada:

"Quiero tener a unos pocos devotos sinceros, no muchos devotos falsos o que pretenden serlo"

(Carta de Srila Prabhupada a Karandhara, 22/12/72)

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