martes, febrero 03, 2009

«Purana» para Apaches

Por Astika das

En el mundo espiritual, Vaikuntha, no hay críticos porque ahí todo es perfecto. Sin embargo, en el plano material el ejercicio de la crítica no sólo es deseable sino indispensable para evitar la impunidad. En muchas ocasiones me han acusado de ofensivo por señalar ciertos yerros o defectos de los líderes del movimiento Hare Krishna, pero no lo he hecho por gusto sino porque considero que esa es mi responsabilidad ante mi maestro espiritual A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada.

En Jagannath Puri, días antes de que falleciera Bhakti Promode Puri Maharaj, asistí una noche a una clase que dictó Sripad Nimai, un devoto erudito que vivió muchos años al lado de Srila Sridhara Swami. Después de la clase, un joven devoto europeo —con el afán de lucirse— hizo una pregunta completamente insulsa a mi modo de ver. Preguntó algo así como si Paramatma está abajo o arriba del corazón. Con su acostumbrada erudición, Nimai salió airoso del aprieto.

Y una vez concluida la clase le solicité a Sripad Nimai una entrevista privada. Ya instalados en su habitación, le confesé que en México muchos devotos —entre ellos mi esposa Bimala devi dasi— me acusan de ofensivo por hacer declaraciones veraces sin ninguna diplomacia. Por ejemplo —le dije— en mi último viaje a India visité el asrama de la misión Sri Caitanya Saraswath Math. En esa ocasión los devotos occidentales declaraban con mucho entusiasmo que los darshanas de Govinda Maharaj eran muy nectáreos. Pero en dos ocasiones que participé en esos darshanas, en realidad no los encontré nada nectáreos. Si alguien me pide mi opinión al respecto, yo no la oculto —y por esa razón se me acusa de ser ofensivo.

EN LA COCINA DEL MATH NO HABÍA ACEITE

Yo tuve la suerte de asistir personalmente a algunos de los últimos darshanas que dictó en Nueva York y en India Su Divina Gracia A.C. Bhaktivedanta Swami Srila Prabhupada. Asimismo, varias veces tuve la fortuna de escuchar personalmente los gloriosos discursos de Srila Sridhara Swami. No se trata de comparar a Govinda Maharaj con esas dos grandes personalidades, porque las comparaciones siempre resultan odiosas. Pero durante los istagosthis a los que asistí en Navadwipa yo esperaba que Govinda Maharaja por lo menos nos diera algunas sugerencias que nos permitieran avanzar en el arduo sendero espiritual —pues no viajé cerca de 17,000 millas sólo para escuchar algunas anécdotas familiares.

Durante mi última visita a Kolerganj, Navadwip, asistí precisamente a un istagosthi celebrado en la habitación de Govinda Maharaja, el lider de la Sri Caitanya Saraswat Math. En esa ocasión, un devoto puso en manos de él un libro que sus discípulos acababan de publicar. Govinda Maharaj, muy orgulloso cogió el libro, se lo mostró a la audiencia, y elogió su dimensión diciendo que resultaba muy cómodo para ponerlo bajo el sobaco y abordar el avión. Sin embargo, nunca explicó el contenido del nuevo libro.

Cuando Govinda Maharaj se hallaba elogiando las características del nuevo libro, un devoto bengalí se hizo presente en la habitación y —en bengalí— cruzó varias palabras con el líder de la misión Sri Caitanya Saraswat Math. Como yo no entiendo ese idioma, pensaba que hablaban acerca del nuevo texto, pero después del darshana alguien que sí habla ese idioma me explicó que no discutían sobre el libro sino de un ingrediente de la cocina que les faltaba.

Sripad Nimai me dijo que ser veraz no es ofensivo, y que los ofensivos en este caso son aquellos que me califican a mí de ofensivo. Él ilustró ampliamente su disertación con una cita de Bhaktivinoda Thakur, la cual aparece en su obra «El Bhagavata», la cual tradujo Bhakti Kusum Asrama Swami.

Es inminente una aclaración sástrica sobre lo que significa la palabra ofensa. Por lo general, los devotos confunden el término ofensa con el término crítica. Para aclarar más esto, aproveché la reciente visita que hizo a México Su Santidad Bhakti Vichar Bishnu Swami. En el restaurante del Centro Cultural Prabhupada (mejor conocido como Vrinda, en la ciudad de México), le pregunté a Bishnu Swami lo mismo que a Sripad Nimai en Jagganath Puri. De nueva cuenta, Bishnu me dijo que mi actitud no es ofensiva. Yo le propuse la necesidad de escribir un libro completo sobre la diferencia que existe entre la ofensa y la crítica, y él estuvo de acuerdo.

UNA OFENSA INVOLUNTARIA

Explico todo lo anterior porque recientemente recibí el libro «Srimad Bhagavata Mahapurana» (Canto Once), el cual fue editado por los devotos de la Misión Sri Krishna Caitanya.

Durante su reciente visita a Monterrey, Bishnu Swami —y escribo Bishnu con B de burro y no con V de vaca, como yo siempre había visto escrito el término, porque así lo escribe algún “burro” que diseñó el volante difundido para anunciar la visita del mencionado Swami— me informó que Jagannath das, un devoto de la misión Sri Krishna Caitanya que vive en Cuernavaca, acababa de editar el Canto Once del «Srimad Bhagavatam». Maharaj comentó que el libro es muy hermoso y que su lectura resulta indispensable para los devotos.

Como la mayor parte del tiempo yo vivo en la provincia, le solicité a mi esposa que vive en el DF que comprara un ejemplar del mencionado libro y que, a la brevedad posible, me lo enviara. Cuando llegó el libro, ávido lo abrí al azar e inmediatamente me percaté de la deficiencia de la traducción. La traducción del inglés al español está a cargo de Sripad Jagannath das. Eloisa Nieto Ayala es responsable del cuidado de la edición. En la primera página, bajo el subtítulo de “Consideraciones”, Prabhu Jagannath reconoce la dificultad de la traducción y de antemano le pide disculpas a los lectores por los yerros que encuentren en el texto. Sin embargo, los errores no sólo son de traducción. Hay muchos errores de construcción gramatical, y lo peor de todo es que hay graves errores de interpretación. Aunque esos errores no son justificables, pudieran ser comprensibles de alguna forma.

Lo que de plano resulta incomprensible es que haya errores garrafales en los pies de las fotos de la sucesión discipular. Debajo de la foto de Gour Kishore das Babaji dice “Bhakti Vaibhava Puri Goswami Maharaj”, quien es en realidad su nieto espiritual. Este error de Prabhu Jagannath no es una deficiencia de traducción, sino una negligencia que debe considerarse una absoluta falta de respeto hacia su propio gurudeva.

Debajo de la foto de Jagannatha das Babaji, gurudeva de Bhaktivinoda Thakur, dice “Sri Srila Bhaktivinoda Thakur”. Estos errores garrafales que ya aparecen en la presentación del libro son el preámbulo de una cadena de errores más graves que deben señalarse para que el editor, en este caso Prabhu Jagannath, conozca la etiqueta vaisnava en cuanto a la edición y publicación de libros.

TORO SENTADO UVACA

El «Srimad Bhagavatam» es la encarnación literaria de Krishna y no la encarnación “literal”, como se repite en la traducción de la introducción a cada uno de los 31 capítulos del libro. Ese gazapo aparece en el primer párrafo del Prefacio, el cual fue escrito por Su Santidad Bhakti Vaibhav Puri Goswami Maharaj.

Y concluye ese primer párrafo con otro error de traducción: Es considerado [se refiere al «Srimad Bhagavatam»] como el más delicioso, jugoso y maduro fruto del árbol védico y que destruye por completo el sufrimiento de la gente en el porvenir. En vez de eso, el traductor debió haber dicho que la lectura de ese maravilloso libro destruye por completo el sufrimiento en el porvenir de la gente. En otras palabras, no es en la gente del futuro, sino en el futuro de la gente. El texto pierde su sentido por la forma en que terminó la traducción del párrafo.

A continuación transcribo la primera parte del enorme segundo párrafo, cuya lectura —como está— provocaría que cualquier lector normal quisiera cerrar el libro: Srila Vyasadeva, el autor de todas las escrituras Védicas, los Upanishads, Puranas y el gran Épico Mahabharata contiene al Srimad Bhagavad Gita). La oración termina inexplicablemente con un cierre de paréntesis, sin que haya paréntesis de apertura. Evidentemente se trata de un error ortográfico que debió corregirse al revisar el texto, pero la encargada de cuidar la revisión de la edición no reparó en ese yerro. Pero lo peor es la sintaxis de esta sentencia —sin estructura ni sentido. Y en toda esta versión en español del libro encontramos esa sintaxis catastrófica, que sólo un apache puede entender.

Este caos sintáctico apache se hace todavía más evidente al seguir leyendo el segundo párrafo: Habiendo sido aconsejado por su maestro espiritual el sabio Narada, el Srimad Bhagavata Mahapurana fue escrito por Vyasadeva, alcanzando la paz mental. Así predicar gran jefe Toro Sentado valientes pieles rojas querer saber sobre verdad védica. Bhagavatam bonito apaches estar contentos amigo Jagannath esfuerzo. Jagannath ahora apache honorario.

A pesar de esto, decidí continuar leyendo el texto para hacer un análisis más amplio para los lectores de «El Tambor Rugiente».

OFENSAS DE OMISION, PEORES QUE DE COMISIÓN

Omitir la foto de A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada en las fotos de la Cadena de Sucesión Discipular es algo imperdonable. De no ser por la titánica misión de Srila Prabhupada, no existiría ninguna misión vaisnava en Occidente.

Muy probablemente devotos como Prabhu Jagannath desconocen que Srila Prabhupada dijo que la lectura del «Srimad Bhagavatam» debe hacerse paulatinamente, es decir, leer los nueve primeros cantos antes de proceder a la lectura del Canto Diez, que contiene los pasatiempos de Sri Krishna.

Srila Prabhupada hizo una concesión a ese respecto al publicar el libro «Krsna», que es un resumen del Canto Diez. Pero lo hizo porque cuando vino a Occidente él ya era muy viejo e intuía que no tendría tiempo de traducir todo el «Srimad Bhagavatam». Sin embargo, a menudo insistía en la necesidad de proceder paulatinamente en su lectura. Él también señala que si el lector no abandona sus deseos sexuales, mejor es no pasar de la lectura del Segundo Canto. Srila Prabhupada también sugiere que antes de leer el «Srimad Bhagavatam», es necesario leer todos los 700 versos de «El Bhagavad-gita Tal Como Es». A este respecto existe entre los devotos neófitos mucha insubordinación hacia las instrucciones de Srila Prabhupada, pues ellos alegan que no son discÍpulos de Srila Prabhupada, y que su gurudeva —en este caso Bhakti Vaibhav Puri Goswami Maharaj— está al mismo nivel de Srila Prabhupada y que él no les ha pedido que lean los libros del Fundador-Acharya de ISKCON.

Srila Prabhupada también insistía con frecuencia que el traductor debe ser devoto de Krishna y no un “karmi”, pues en la traducción de los libros devocionales es importante conocer el inglés pero aún más importante es conocer su significado.

LOS ERRORES DE INTERPRETACION ANULAN EL SIGNIFICADO DEL TEXTO

Podría mencionar aquí cientos —o mejor dicho miles— de errores de construcción, traducción e interpretación, pero eso haría muy pesada esta nota. Por el momento voy a referirme al texto 47 del Capítulo Dos, en el cual el traductor incurre en un grave error de interpretación, y así da al traste con toda la filosofía vaisnava. En la traducción del texto 47 se lee: Alguien que adora la forma de la Deidad del Señor con gran atención por el placer del Señor, pero que adora a los devotos del Señor u otros seres, es considerado como un devoto de la clase más baja. Hasta aquí la traducción de Sripad Jagannath.

En «El Néctar de la Devoción» se explica que el devoto de tercera clase es aquel que adora el aspecto arca-vigraha de la Deidad, pero que irrespeta a los devotos. No obstante, el texto citado arriba dice que ese devoto de tercera clase adora al Señor y “adora” a los devotos. Sin tener un conocimiento previo de los sastras, como yo lo tengo, jamás se detecta el error y no se entiende la filosofía. La traducción del libro está plagada de errores como este, que en lugar de presentar el mundo vaisnava como es, lo distorsiona y desvirtúa.

Yo en realidad hubiera preferido escribir una apología sobre este texto, pues me imagino la enorme inversión en dinero, tiempo y energía que hicieron Prabhu Jagannath y su colaboradora, Eloisa Nieto Ayala. Sin embargo, si yo lo hiciera traicionaría las enseñanzas de nuestros preceptores espirituales.

EPÍLOGO FAMILIAR

Cuando le conté por teléfono a mi esposa —Bimala devi dasi— cuál era mi opinión acerca de mi lectura de esta versión en español de «Srimad Bhagavatam» (Canto Once), ella me respondió: “No vaya a publicar eso porque se van a enojar Durlabha e Iswara das, y ya no podrá visitar su casa”. Lamento mucho no estar de acuerdo con la opinión de mi esposa, pues la amistad sostenida en la mentira no vale la pena. Srila Bhaktisiddhanta solía decir: Aquel que me elogia es mi enemigo, y aquel que me critica es mi amigo.

Con ese espíritu hago esta reseña, y no con un afán destructivo. En realidad no puedo entender por qué Prabhu Jagannath no se acercó con alguien que posea experiencia en la publicación de libros. Por ejemplo, R.K., el editor de «El Tambor Rugiente», durante muchos años fue traductor, editor y corrector de los libros de Srila Prabhupada. Vrajavasi Prabhu, quien durante varios años coordinó El Colegio de Rupa Goswami, tradujo y editó libros como «Las Enseñanzas del Señor Caitanya, el Avatar Dorado», así como «El Diario Trascendental» de Hari Sauri das. En mi caso, yo publiqué con Editorial Novaro la novela «La Pipa de la Paz», colaboré durante un año en “El Diorama de la Cultura” del periódico «Excelsior», y escribí una crónica para el Suplemento Cultural de «Siempre» cuando estaba a cargo de Carlos Monsiváis.

En el transcurso de la lectura de el «Srimad Bhagavatam» hay muchas citas que invitan a asociarse con devotos. De hecho ese es uno de los 5 requisitos principales que señala en Sus enseñanzas Sri Caitanya Mahaprabhu. A mí me encantaría hacer reseñas favorables de trabajos literarios (no literales) que hagan los devotos, pero no los veo por ninguna parte. Pero no se desanime Jagannath Prabhu, y como dicen Los Huracanes del Norte: “Échele mi Chuy”.

2 comentarios:

San Luis Al Instante dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

YO CREO QUE NO ES NECESARIO MODERADOR. POR DOS RAZONES, UNO, PORQUE PARA SU LA INTENCION DE LA PERSONA QUE QUIERE SOLTAR SUS COSAS, Y DOS, CON ELLO, TU NO DEJAS VER ESAS COSAS QUE TIENEN DENTRO, Y QUE JUSTAMENTE ES AQUI DONDE SE PUEDE VERLO. PUES ESTANDO LAS COSAS SOLTADAS POR TALES PERSONAS, ES CUANDO SE SOPESA, Y CALIBRA TODO, Y AUN MAS, CON TODO LO QUE HAY AQUI EXPUESTO, LA VISON NO SOLO SE COMPLEMENTA, SINO QUE ESO DA, LAS MUCHAS PRUEBAS DE DISTINTOS TEMAS QUE SON NECESARIAS PARA CONFIRMAR TUS MISMAS EXPOSICIONES, ... ASI QUE, CON LA MISMA LIBERTAD QUE TIENES DE CRITICAR A TODOS, (SOBRE TODOS SINVERGUENZAS, CHORIZOS, LADRONES MARIKAS Y ESTAFADORES, TAMBIEN GANSTERS) DEJA ESA MISMA LIBERTAD DE QUE DIGAN LO QUE QUIERAN EN TU BLOG, ES LA SECCION RESPECTIVA,PARA QUE DIGAN ABSOLUTAMENTE LO QUE QUIERAN, PORQUE ESE ES EL TERMOMETRO PARA SABER QUIEN ES QUIEN, SINO APROVECHAS ESTA SECCIÓN... COMO PUEDES CONFIRMARTE O ¿COMO PUEDES QUITARTE SEMEJANTE LUJO, QUE MAS QUE UN GANCHO ES UN ESPEJO INTERNO?