Renunciantes y niños

--A la rorro niño...

[La siguiente nota acaba de aparecer en el Sampradaya Sun. Es de nuestro hermano Nandanandana Prabhu, de México.]

Renunciantes y Niños

por Nandanandana dasa

18 de julio de 2011 — MEXICO (SUN) —

Renunciantes, a saber sannyasis y brahmacaris, no tienen nada que hacer con niños y mujeres. Sin embargo, en fechas recientes han aparecido en varios sitios internet imágenes de sannyasis con niños en su regazo. El deber del sannyasi es demostrar las normas devocionales y preservarlas. Soy miembro de Iskcon, y asumo que no pasa por la mente de esos sannyasis nada malo; sin embargo, es deber de ellos observar las normas.

En febrero de 1975, durante la segunda visita de Srila Prabhupada al templo de la ciudad de México, durante una clase un brahmacari puso en su regazo a un niño pequeño. Srila Prabhupada le lanzó una severa mirada de desaprobación. Incluso hoy, el devoto recuerda esa mirada vívidamente.

- - - o - - -

Reflexiones Rugientes

La anterior nota de Nandanandana Prabhu nos obliga a reflexionar sobre el papel y las normas que rigen la vida de un sannyasi.

--Sri Bhagavan uvaca.

En efecto, la norma general es que un sannyasi no anda jugando con niños. Su papel es mantenerse al margen de los asuntos de la sociedad en general, y hacerlo con el ejemplo.

Una razón adicional para semejantes normas es que con el contacto con la vida familiar y cotidiana de la gente, devotos o no, quizá el renunciante termine sintiendo que le gustaría cambiar sus hábitos de renunciación por la vida familiar. El Gita claramente advierte que por el contacto con los objetos de los sentidos uno desarrola apego por ellos.

En el caso de Srila Prabhupada, existen unas fotos muy antiguas, de 1965, donde se le ve interactuando con un bebé en la casa donde vivió en Pennsylvania antes de mudarse a Nueva York y fundar Iskcon.

Esas fotos no muestan a Srila Prabhupada cargando al niño, sino simplemente intercambiando una sonrisa con él, quien era el hijo de sus anfitriones. Hay otra serie de fotos, muy famosa, donde Srila Prabhupada aparece sentado en un jardín, en la grama, en Inglaterra, y se le acerca un pequeño como de dos años. Si no mal recuerdo, intercambian una flor, pero tampoco se ve a Srila Prabhupada cargando al niño ni jugar con él en forma mundana. Srila Prabhupada estaba allí para dar darshan a los devotos reunidos.

--Tres cochinitos están en la cama...

Para algunos lo anterior puede parecer desencarnado, pero es así como debe comportarse un sannyasi y un brahmacari que lleva una vida de renunciación. Deben dar ejemplo de renunciación a cada momento. No deben disfrazar sus propias debilidades argumentando una cercanía con las masas, para satisfacer su necesidad de abrazar a los bebés y jugar con ellos.

--Allá en la fuenta, había un chorrito...

Peor aun, como nos ha tocado ver repetidamente en forma gráfica en El Tambor, están los sannyasis que abrazan y se andan restregando con cuanta mujer se topan.