Click: Mamá Om...

por Radha Krishna das

Un corresponsal de El Tambor Rugiente nos hizo llegar el documento que presentamos aquí. Es una lista de autos (acciones) en juicios de la Corte Judicial 107, ubicada en el condado de Cameron, Texas. Esta lista particular corresponde a los autos del jueves 2 de abril de 2009, e incluye juicios civiles, criminales, avisos, etc.

En los juicios civiles de la lista aparece William Steven Henricks, también conocido como Guru Prasad Swami --o Pinochopada, para los cuates. Esto es debido a que Pinochopada entabló un litigio en contra del fiduciario BBVA Compass Bank. ¿What?


Resulta que dentro del condado de Cameron se encuentra la ciudad de Harlingen, donde vivía la mamá de Pinochopada. Ella ya falleció, y seguramente estableció un fideicomiso (un Trust) con bienes que dejó en beneficio de su chiquitín.

Un fideicomiso es distinto que una herencia. Un fideicomiso es un fondo creado por un fideicomitente (en este caso seguramente su mamá), para ser administrado por un fiduciario --aquí BBVA Compass Bank--, en beneficio de un tercero, el fideicomisario --aquí Pinochopada. Todo fideicomiso tiene sus propios estatutos, de manera que el beneficiario no puede hacer uso arbitrario del fondo.

Entonces, este fideicomiso particular contiene bienes --ya sea dinero, alguna propiedad, etc.-- en beneficio de Pinochopada, y administrado por BBVA Compass Bank. Sabemos que Pinochopada se quedó con la casa de su mamá en Harlingen, y que pasa allá ciertas temporadas del año, alejado de sus discípulos a quienes considera unos nacos y chupamedias.


Parece que Pinochopada no estaba contento con la administración del banco fiduciario, y los demandó. Sin embargo, no podemos ponernos a especular sobre los detalles de la demanda. Lo que sí queda claro es lo siguiente: 1) Que existe un fideicomiso, 2) Que Pinochopada es un beneficiario de éste, 3) Que mantiene la existencia del fideicomiso como un secreto, y 4) Que tener fideicomisos no es lo que le corresponde a un sannyasi.

Esta información gráfica reafirma lo que recientemente dijo Rocana das sobre la falsa renunciación que impera en ISKCON. Dice él: "En esencia, los sannyasis han abandonado el principio de que en la orden de renunciación debes permanecer libre de todo apego material: dinero, mujeres, poder, prestigio, y demás".

Srila Prabhupada administró mucho dinero mientras dirigía Iskcon. Sin embargo, todo lo hacía para desarrollar proyectos y publicar libros. Él nunca estableció cuentas privadas personales. Es más, las cuentas que existían a su nombre eran operadas por sus discípulos, aunque él tomara decisiones sobre cómo usar los fondos. Por eso Rocana dice: "Srila Prabhupada era muy, muy estricto --conocía los límites y no los cruzaba".


Y continúa: "...déjenme decir que estos sannyasis jóvenes desde el inicio sí traspasaron los límites de los principios de sannyasa". Y los principios siguen siendo traspasados todos los días. Los pleitos del sannyasi Pinochopada Henricks con BBVA Compass Bank son un ejemplo más de ello.

Rocana hace la observación adicional de que en la Gaudiya Math surgieron muchos problemas, pero ninguno de sus líderes "...llegó tan lejos como estos gurus y sannyasis de ISKCON en la forma como exhiben un estilo opulento de vida ante el mundo y ante los seguidores de Srila Prabhupada, y crean normas falsas para quienes lleguen en el futuro".

Lo anterior es cierto. A los hermanos espirituales de Srila Prabhupada los caracterizaba la sencillez en hábitos personales. Eran sannyasis auténticos aunque pudieran tener fallas en otros rubros. Y eso lo pudimos constatar los miles de discípulos de Srila Prabhupada que vimos la forma tan modesta en que todos ellos vivían.


Pero tenemos además el ejemplo contundente de los Goswamis de Vrindavan, que encontramos en el Caitanya Caritamrta. La renuncia total era su característica habitual. Por eso dice Krishna das Kaviraja en el Antya Lila, 6.220: "La renunciación es el principio básico que sustenta la vida de los devotos de Sri Caitanya Mahaprabhu. Al ver esta renunciación, Sri Caitanya Mahaprabhu, la Suprema Personalidad de Dios, queda sumamente satisfecho".

Está, por ejemplo, el caso de Rupa y Sanatana Goswamis, quienes dejaron su trabajo como destacados ministros de gobierno para adoptar una vida de total desapego. O está el caso de la renunciación de Raghunath das Goswami, quien a pesar de provenir de una familia muy rica que además estaba dispuesta a apoyarlo en todo, rechazó toda la ayuda que ellos le pudieran proveer --incluso para beneficiar a otros vaisnavas--, con tal de no alejarse de los preceptos del Señor Caitanya.


Al respecto, podemos recordar el caso de Sanatana Goswami e Isana, relatado en el Madhya Lila, capítulo 20. Sanatana se había escapado de la carcel donde estaba confinado por renunciar como ministro del Nawab (el gobernante musulmán), e iba acompañado de su sirviente Isana rumbo a Varanasi para reunirse con Sri Caitanya Mahaprabhu.

Llegaron ambos con un terrateniente que los ayudaría a cruzar una zona montañosa. Sin embargo, tanta amabilidad y respeto de parte de éste puso a Sanatana Goswami sobre alerta. Así, cuestionó a Isana, quien confesó llevar escondidas 7 monedas de oro.


Sanatana le entregó voluntariamente las monedas al terrateniente quien, sorprendido, se rehusó a aceptarlas, aunque aclaró que conocía de su existencia y que había planeado matarlos para quedarse con ellas. Sanatana le insistió que las tomara, y así fue.

Luego de que cruzaron las montañas, Sanatana confrontó a Isana diciéndole que todavía llevaba oro consigo. Isana reconoció todavía tener otra moneda de oro, a lo cual Sanatana Goswami le dijo: "Toma la moneda y regresa a tu casa". ¿Qué le diría Sanatana Goswami hoy a Pinochopada? Pues: "Toma tu fideicomiso y regresa a tu casa".

Esto es obvio. Pinochopada se presenta como un sirviente del parampara, la sucesión de destacados maestros espirituales que incluyen a Sanatana Goswami. Y quiere hacerle creer a los incautos que acompaña a Sanatana Goswami en su viaje espiritual hacia Sri Chaitanya Mahaprabhu. Pero en vez de renunciar totalmente al mundo y a los bienes materiales --tal como se comprometió a hacerlo al tomar sus votos de renunciación--, va cargando su monedita de oro, las dádivas de mami, el fideicomiso mediante el cual renuncia a la verdadera renunciación.

Ahora, el caso de Pinochopada no es la excepción. Y eso es precisamente lo que advierte Rocana. Se ha vuelto la norma que los sannyasis de Iskcon mantengan fondos privados provenientes de herencias, fideicomisos, donaciones, robos, o lo que sea. Los gurus y sannyasis de la institución son el grupo más rico dentro de ella, aunque deberá ser lo opuesto.

William Steven Henricks, Pinochopada.

Lo anterior es definitivamente una aberración que se aleja del ideal de la tradición vaisnava. Es poco probable que dicha mutación sea corregida, pues el nivel de degradación y contaminación entre los líderes de Iskcon es muy fuerte. Lo único que corresponde hacer es no apoyar en absoluto a dichas personas, pues detrás de la máscara de santidad y renunciación hay un Isana que guarda su monedita de oro, su fideicomiso cortesía de mami, su casa de Beverly Hills, y su cuenta bancaria privada.